Los sindicatos de médicos y facultativos gallegos han convocado una huelga para el próximo 3 de octubre, en la que exigirán la creación de una regulación específica para estos profesionales del sector sanitario. Este movimiento, impulsado por el Sindicato de Médicos de Galicia (SIMEGA) y el Sindicato O’MEGA de Facultativos de Galicia Independientes, se presenta en un contexto donde consideran que su representación en la negociación del Estatuto Marco estatal es insuficiente en comparación con otros grupos profesionales del ámbito sanitario.
Según Enrique Marra-López, secretario general de SIMEGA, «ahora se trata de dar un paso más, ya que las negociaciones que hemos tenido con el Ministerio y el Servizo Galego de Saúde (Sergas) han sido infructuosas y no nos dan contestación». De este modo, en los 20 días previos a la convocatoria de la huelga, se llevarán a cabo asambleas con compañeros para discutir la situación actual.
Entre las principales reivindicaciones figura la creación de un convenio específico para médicos y facultativos del Sergas, que regule sus condiciones laborales y derechos, así como su inclusión en el Estatuto Marco que está elaborando el Gobierno de España. Los sindicatos demandan una limitación de la agenda de Atención Primaria a un máximo de 30 actos diarios por médico, la eliminación de la carga burocrática en ambulatorios y la implementación efectiva de la jornada laboral de 35 horas.
El objetivo de SIMEGA y O’MEGA es reunirse con representantes del Sistema Galego de Saúde (Sergas) con la esperanza de que la Xunta de Galicia apoye sus postulados ante el Gobierno Central. Si no se logra esta reunión, los sindicatos continuarán con la huelga programada.
Cabe destacar que el 3 de octubre también se llevará a cabo otra huelga a nivel estatal, organizada por la Confederación Española de Sindicatos Médicos (CESM) y el Sindicato Médico Andaluz (SMA), de la cual SIMEGA y O’MEGA se están desvinculando. No obstante, consideran que la coincidencia en las fechas de estas movilizaciones fortalecerá su causa. Marra-López expresó: «Teníamos dos posibilidades: quedarnos a mirar o hacerlo coincidir. ¿Y por qué no hacerlo coincidir?»
Peticiones de los sindicatos
Las principales reivindicaciones incluyen la aplicación efectiva de la jornada de 35 horas y mecanismos para la recuperación de los sábados festivos. También exigen cambios en las urgencias hospitalarias y extrahospitalarias, pidiendo que se integren los Puntos de Atención Continuada (PAC) en el sistema.
Martín Rodríguez Piñeiro, presidente de O’MEGA, ha vinculado la sobrecarga en las urgencias al colapso de la Atención Primaria: «Se han quedado reducidas porque están atendiendo a un número de población altísimo debido a que la Atención Primaria ha reducido drásticamente su capacidad de atención».
Respecto a los ambulatorios, Marra-López ha demandado un «cambio radical», solicitando que la agenda se limite a un máximo de 30 actos presenciales. «Los actos administrativos tienen que desaparecer», ha puntualizado, estimando que la carga burocrática consume entre el 30 y el 40 % de la agenda asistencial.
Además, los sindicatos reclaman la igualdad de condiciones para los Médicos Internos Residentes (MIR), buscando que se equiparen los derechos adquiridos para los facultativos. En cuestiones de salud laboral, solicitan la implementación efectiva de protocolos frente a agresiones internas y externas en el ámbito hospitalario.