La Agència Tributària de Catalunya (ATC) se adapta a los nuevos requerimientos de la hacienda catalana para ejercer con plenas garantías el aumento de volumen y complejidad que supone asumir sus funciones. Para ello, se ha acordado un decreto ley que modifica el Libro segundo del Código tributario de Catalunya.
Principales novedades
- Se gobernará mediante el contrato programa.
- Creación de nuevos cuerpos tributarios con perfiles profesionales ajustados a las necesidades reales de la agencia.
- Mayor autonomía para diseñar su estructura organizativa y gestionar el personal.
Contrato programa
El contrato programa deberá establecer las líneas estratégicas, los objetivos, los indicadores de seguimiento, los recursos financieros asignados y las actividades a desarrollar por la Agència.
La propuesta la elaborará el director de la ATC, la ratificará su junta de Gobierno y la deberá aprobar el Consell Executiu.
Personal
La ATC tendrá plena autonomía en materia de personal y para la negociación colectiva de las condiciones de trabajo del personal de los cuerpos tributarios. También le atribuye la potestad para el diseño de su estructura organizativa, y determina que la Agencia se estructura en servicios centrales y territoriales.