Los líderes de la oposición han censurado la falta de previsión y atribuyen las consecuencias del fuego a la «incompetencia política» del presidente de la Xunta, Alfonso Rueda. En un pleno celebrado en Santiago de Compostela el 9 de septiembre, Ana Pontón, líder del BNG, y José Ramón Gómez Besteiro, secretario general del PSdeG, exigieron la dimisión de Rueda tras la ola de incendios que afectó a Galicia en agosto, especialmente en la provincia de Ourense.
Pontón destacó durante su intervención que la ola de incendios es una «consecuencia directa» de la «incompetencia política» de Rueda. «¿Si usted no es responsable de nada para qué le queremos? ¿Para qué le pagamos el salario?», se preguntó, señalando que la mayor contribución del presidente a la crisis fue «ponerse el chaleco de la incompetencia». Criticó que la televisión pública, TVG, se había convertido en «Tele PP» mientras la crisis se intensificaba y el Gobierno «ignoraba» las recomendaciones de expertos, lo que resultó en «un drama, una catástrofe».
En su defensa, Rueda argumentó que todos son responsables menos el propio Gobierno, indicando que en la «gestión del monte, en desarrollo rural, en extinción y en prevención» la Xunta lleva la batuta. Sin embargo, Pontón refutó esta idea, señalando que desde 2009, Rueda había desmantelado las medidas preventivas que se habían instaurado en Galicia.
Además, acusó al Gobierno de dejar «11 millones de euros» en medidas de extinción sin ejecutar, lo que incluye las franjas de protección en parroquias de alto riesgo. También constató que el dispositivo anti-incendios era «más pequeño y no estaba operativo al 100%» durante la etapa de mayor riesgo. «¿Puede ser más incompetente, señor Rueda? ¿Dónde estaba usted mientras Galicia ardía? ¿En moto? ¿De fiesta en fiesta?», cuestionó Pontón, añadiendo que Rueda tardó cinco días en aparecer con el chaleco de emergencias.
Demandas de Dimisión por Parte del PSdeG
José Ramón Gómez Besteiro, por su parte, exigió la dimisión de Rueda, afirmando que «solo hay un camino». Según Besteiro, Rueda se mostró como «un perfecto incompetente» en el ejercicio de sus competencias, señalando que «todo lo que dependía de usted se mostró incompleto, a medias, ineficiente o abandonado». Criticó que no se haya anticipado a los incendios y que tardara 12 días en «aparecer» tras la crisis.
Besteiro también destacó que la Cámada gallega había aprobado 123 medidas para prevenir incendios en 2018 que no fueron implementadas hasta la fecha, dejando a Galicia en una situación de «fuegos extremos con la misma falta de planificación y prevención que hace siete años». Además, censuró que Rueda pidiese 200 militares mientras mantenía 200 plazas sin convocar en el dispositivo anti-incendios.
Puntos de Vista de Otros Partidos
En la misma línea, Armando Ojea, diputado de Democracia Ourensana, consideró que Rueda reconoció que «no se estaba haciendo lo suficiente en prevención». Ojea coincidió en que la mayoría de los incendios son intencionados, pero recalcó que la responsabilidad de la administración es tomar medidas para evitar que esto conduzca a consecuencias devastadoras.
En respuesta, el portavoz parlamentario del PPdeG, Alberto Pazos, defendió a Rueda, asegurando que «el presidente estuvo y está donde hay que estar». Pazos criticó a la oposición por presentar «dos peticiones de dimisión, con cero propuestas» y la acusó de no haber estado activa durante la crisis, asegurando que su prioridad fue «convocar protestas y pedir el voto» mientras los incendios se expandían.
Con estas intervenciones, el conflicto sobre la gestión de incendios en Galicia ha dejado en claro las diferencias significativas entre el Gobierno regional y la oposición, siendo este un tema que continúa acaparando la atención pública y mediática.